Después del rally informativo positivo que tanto esperábamos y necesitábamos, con noticias esperanzadoras en cuanto a lo social y económico, es momento de sentar las bases de la recuperación.

La renta fija corporativa ha recuperado gran parte de lo perdido desde marzo y comienzan a estabilizarse los precios. Tras una recuperación de entre el 7-10% en el último mes hay que rebalancear las carteras y reestructurar los libros para pasar y afrontar el salto del año. Ha sido un año volátil, y haber preservado el capital de los clientes e inversores es ya una realidad y un trabajo bien hecho.

Parece que se estabilizan los precios, índices y que llega un momento de reflexión y valoración. Lo ideal sería construir un suelo y las bases de la recuperación. Lo que está claro es que hay liquidez en el mercado, apoyado por el BCE y la FED y su infinita liquidez disponible para paliar los estragos de la pandemia.

El Fear & Greed Index, índice que mide la codicia y el miedo, vuelve a máximos del año. Podría ser irrelevante, pero suele ser un indicador social del sentimiento de los pequeños y medianos inversores. Nos cuenta y dice que quizá sea el momento de pasar al modo conservador.

Enero va a ser un mes marcado por los datos macroeconómicos, donde veremos la realidad y profundidad de este latigazo. Mucho nos tememos que el aumento del déficit y deuda pública van a ser mayores de lo esperado y publicado en las estimaciones anteriores. Tendremos que estar muy atentos a los bonos de gobierno español y al soporte que nos proporcione la Unión Europea.

La semana la damos por terminada con Thanks Giving en USA. Pero las cifras de Black Friday y Cyber Monday nos darán los datos reales de consumo, buen marcador del sentimiento.