Semana de contraste. Por fin llegaban las ansiadas noticias sobre los resultados clínicos de las posibles vacunas. Ahora es el momento de Moderna, la farmacéutica americana mejoraba los resultados en cuanto a probabilidades de éxito (casi un 95%) y necesidades logísticas, reduciendo los problemas que podría tener la vacuna de Pfizer (80 grados bajo cero de almacenamiento).
Positiva noticia que hizo que los índices, sobre todo como Ibex35, tan expuestos a empresas cíclicas, volaran y recuperaran cotas de junio. Destacamos que, mientras el resto de los índices europeos (salvo Italia), americanos y asiáticos han recuperado los niveles prepandemia, el Ibex35 y el MIB italiano siguen a niveles aún del 20% de descuento.
Y es que, aunque se empiece a ver la luz al final del túnel, por el camino han quedado problemas en algunos casos insalvables. Y la dificultad no solo radica en eso puesto que aún no hemos terminado: el día a día en las ciudades europeas, los contagios, ucis, fallecidos, siguen generando malas cifras y el aumento de las medidas restrictivas y confinamientos sigue creciendo.
Ya sabemos cómo afecta. Las economías se resienten de forma proporcional a las preocupantes noticias, y esto puede ser la estocada final para muchas pymes, autónomos e incluso grandes corporaciones. Queda mes y medio para acabar el año, y esto no ha terminado. Pero hay que ser positivos, aguantar y reforzarse para intentar salir fortalecidos. Oportunidades hemos visto en el mercado y se han aprovechado para recuperar el lastre de este año.
También, esta semana nos sorprendía la venta del 100% de su filial americana de BBVA y la confirmación, en el mismo día, de la posible fusión, o más bien casi adquisición del Banco Sabadell. Maniobra acertada del BBVA que reforzaba sus balances y liquidez, y acomete una estratégica alianza que le refuerza dentro del sector bancario español y mundial.
La resaca de las elecciones americanas comienza a tomar forma, el derrotado Trump, aunque sigue peleando, asume el fracaso. Y Joe Biden empieza progresivamente a tomar el control y hacer efectivas sus decisiones electorales. Habrá que estar atentos a las tecnológicas y energéticas.
Nuestra opinión es que después de esta esperada subida en cuanto a bonos e índices, comienza otro “momentum”, rescatar los verdes conseguidos desde verano y hacer caja para ponderar carteras, e ir a liquidez o bonos de gobierno que nos garanticen seguridad y rapidez de acción para acometer inversiones después de analizar, de nuevo, qué compañías pueden estar infravaloradas.
Creemos que se alejará la volatilidad y viene un periodo de estabilidad, reforzamiento, suelo y valoración. Será interesante ver cómo ha afectado realmente y no especulativamente este periodo de pandemia. Afianzar niveles y estabilidad de aquí a principios de año es nuestro punto de vista.
Marcos Harguindey
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